En una emotiva jornada cargada de significado y compromiso con la memoria, la Editorial Universitaria de la Universidad Provincial de Córdoba llevó a cabo el pasado miércoles 17 de abril un acto de homenaje a los editores como figuras fundamentales de la cultura.
El acto comenzó con un sentido mensaje de bienvenida, resaltando la importancia de recordar siempre los valores de Memoria, Verdad y Justicia. La jornada, que incluyó un taller previo y el homenaje propiamente dicho, fue concebida como una oportunidad para rescatar y celebrar las ideas que han sido perseguidas y censuradas a lo largo de la historia.
El nombre del evento, «Las ideas que no vamos a dejar quemar», hace referencia al trágico episodio de la quema de libros llevada a cabo por la dictadura militar argentina en 1980, en particular el millón y medio de libros quemados frente al Centro Editor de América Latina (CEAL). Este acto de barbarie, diseñado para aniquilar el pensamiento crítico y la diversidad cultural, sirvió como punto de partida para reflexionar sobre la importancia de preservar y difundir las ideas que desafían el statu quo.
El taller, a su vez, tuvo como objetivo propiciar la edición como un acto proyectual, identificando colectivamente las ideas que merecen ser visibilizadas y compartidas. Este proceso de edición experimental buscó fomentar una reflexión situada, valorizando la edición como un proyecto social y colaborativo que promueve la construcción y difusión de la cultura en todas sus formas.
El momento central del evento fue el homenaje a los editores, destacando su rol fundamental en la preservación y difusión del conocimiento. Se destacó a tres importantes referentes de la cultura argentina y cordobesa: Boris Spivacow, Alberto Burnichon y Victoria Ocampo. La entrega de un poster tipográfico enmarcado a la familia de Burnichon simbolizó el reconocimiento a su legado y su compromiso con la cultura libre.
El acto contó con la presencia de la rectora, Julia Oliva Cúneo; la directora de la Editorial, Mariela Edelstein y representantes de diversas instituciones y organismos gubernamentales, así como artistas y miembros de la comunidad educativa. La proyección de obras del artista Gabriel Orge añadió una dimensión visual y emotiva al evento, recordando el pasado y convocando a la acción presente.
En sus palabras de cierre, los organizadores reafirmaron el compromiso de seguir defendiendo la cultura y las ideas, promoviendo espacios de producción y diálogo. «Nos seguimos encontrando en cada página», concluyeron, destacando la importancia de mantener viva la llama del conocimiento y la libertad de expresión en tiempos desafiantes.